Cuando estás por tomar una decisión estas observando las futuras posibilidades que resultarán de tu posible elección, es decir, las consecuencias positivas o negativas y es por esta razón que algunas veces no querrás tomar tu elección a la ligera.
Al buscar tener una decsión sólida muchas veces cairás en un error en el cual sobre analizas los posibles escenarios llegando incluso al agotamiento, pero esto no es ideal ya que cuando te encuentras aquí en realidad ya entraste en el ciclo de la procrastinación.
En este punto tu decisión por tanto se ve detenida por alguna de las siguientes razones:
- piensas que es incorrecta
- te parece imperfecta
- no crees que le esté sacando el máximo de provecho
El problemas es que muchas veces nuestras decisiones estarán delimitadas en un periodo de tiempo dado en que las consecuencias de salir de este podrían ser más problemáticas que tomar la decisión persé, por tanto, no tomar un decisión es muchas veces peor que tomarla a pesar de que parezca incorrecta o imperfecta.
El perfeccionismo es solo un nombre bonito para algo negativo y si piensas que tu posible decisión no está sacando el máximo provecho del la situación entonces seguramente caes en este error.
Perfeccionismo = improductividad
El perfecionismo es el padre de la procastinación por que lo único que hace es posponer lo inevitable, pero es peligroso por que te hace creer que estás siendo eficiente o inteligente cuando es todo lo contrario.
Hay varias maneras para superar la parálisis por análisis y lo primero es reconocer cuando estás cayendo en este error.
Una vez detectes que caíste en esto ahora sí puedes ponerte manos a la obra y usar diferentes estratégias.
- Analizar el peor escenario directamente (y no múltiples escenarios uno a uno)
- Delegar la decisión
- Delegar la decisión
- Tirar un dado y elegir la opción
- Poner una fecha límite para la decisión
Analizar el peor escenario directamente
Si vas directamente al peor escenario habrás optimizado tiempo dado que no tendrás que analizar cada uno de los escenarios plausibles si no que enfocarás tu energía a lo que es absolutamente lo “peor”. Aglunas veces te darás cuenta que hay diversas maneras para contrarrestar las consecuencias negativas y te permitirá prepararte adecuadamente para ello. Muchas de las veces lo peor no se dará.
Delegar la decisión
Esta opción se explica por sí sola, simplemente deja que alguien decida por ti, al final de cuentas tu has sido quien determinó las opciones, deja entonces que alguien más decida si te es difícil hacerlo por tu cuenta. Esto será mejor que no decidirse y atrasar todo o que las consecuencias de la indecisión te golpeen.
Delegar la decisión
Esta opción podría parecer contraproducente pero en realidad es un motivador, al fin de cuentas ya tienes tus opciones ¿qué más da dejarlo al azar? Algunas veces te percatarás que tu yo interno se ha cargado en favor de un decisión (asignada a cara o cruz) entonces ahí habrás descubierto que tu subconiente en realidad si se ha decidido por una opción, toma esa e ignora que la cara que haya caído; si lo anterior no sucede entonces deja que la opción sea la cara que haya caído.
Tirar un dado y elegir la opción
Esta es una variante de la moneda y es para cuando existen más opciones así que puedes aplicarla del mismo modo que la moneda al aire.
Poner una fecha límite para la decisión
finalmente poner una fecha límite te podría ayudar a hacer conciente un plazo para cual sí o sí debes tener esa decisión, esto por sí solo podría incentivar a tener la decisión o en su defecto podrías usar cualesquiera de las estrategias anteriores para tener en tiempo esa decisión.
Un punto más antes de terminar. Es verdad que algunas decisiones sí requieren de un análisis minucioso o lo que se llama, pensamiento profundo, así que debes saber diferenciar este del sobrepensar.
El pensamiento profundo tiene las siguientes características:
- Te ayuda a seguir adelante
- Da soluciuones
- Se enfoca en lo que importa
- Es emocionalmente neutral
Mientras que el sobrepensar:
- Te atora
- No produce entendimiento
- Es inconsiente
- Te drena emocionalmente
En conclusión recuerda que darle vueltas a una decisión no es productivo, crea una estratégia para autodetectar cuando caigas en parálisis por análisis y utiliza todo lo que esté a tu disposición para tomar esa decisión en tiempo. No tomar una decisión podría ser peor que tomarla.